One day.. one sweet day.. I'm gonna forget your name...

jueves, 23 de febrero de 2012

Princess-

Y ahora supongo que mi castigo es bailar eternamente sobre la nieve, con zapatos de hierro al rojo vivo, mientras la corte se ríe de mí.

miércoles, 8 de febrero de 2012

Vuelta al principio.

Son las diez y media de la noche de la víspera de mi decimosexto cumpleaños. Y vuelvo a lo mismo.
Solo que ahora las cosas han cambiado. La luz aletargada del triste atardecer de Madrid se ha convertido en su noche sin estrellas, con una luna olvidada y sola. Y ahora cuando miro esa ventana sigo pensando en saltar. Pero no por ella. Ahora he aprendido que desde aquí algún ángel misericorde podría engancharme a los tendederos, dejándome colgando de un fino hilo hasta que alguien me buscase.
No, ahora miro a lo grande. Miro por ese balcón, que el blanco sol de invierno suele iluminar con su cegador resplendor, y pienso que eso sí que sería como volar.
Pero ahora ya no es lo mismo que me atormenta. Si me vieses, que sé que me estás viendo, ya no verías a la chica fuerte, la que te abrazaba y te decía que te volvería a ver en tan solo un mes. Verías a una chica llorosa, que no sabe qué va a ser de ella mañana, enamoradiza y olvidadiza. Y pese a que tu recuerdo ya no me arde en las venas, es el mío propio, el de alguien que no tenía problemas el que me hiere. Y aún deseo volver a los antiguos tiempos, en el que era capaz de sobrevivir sin nadie. Y ahora no me propongo olvidar, ahora me propongo renacer, volar sobre alas de fuego. Se que este año no va a cambiar nada. Siempre se repite la misma pauta. Y eso me asusta. Pero no voy a hacer nada por cambiarlo. Gracias destino, Dios, universo, Parcas, lo que sea a lo que le tengo que agradecer, por dejarme vivir un año más.

martes, 7 de febrero de 2012

¿Cuándo olvidaste sonreír...

... si no le tienes al lado? ¿Desde cuando sientes que no puedes vivir sin él? ¿Cuándo has hecho tú este tipo de cosas pequeña? Mi querida niña, ¿desde cuándo dependes de alguien?
Siempre has sido fuerte, nunca llorabas por nadie. ¿Ahora notas cómo duele? En el año pasado jamás imaginaste que la vida volase así de rápido, ¿cierto?
Tenías tu vida montada, con él, todo tu futuro, tu casa, tu amor eterno. Creías que podías con todo. Hasta que te das cuenta de que eses no es el futuro que buscas.
Y entonces cambias radicalmente, te dejas llevar por la promiscuidad, y no te fijas en él, por estar obnubilada en un pelo más largo. 
Y entonces te das cuenta de que eso tampoco es lo que quieres. Y te das cuenta de que el pelo tan largo no te importa, y que poco a poco te gusta. Pero él  ha cumplido su sueño, con la chica que siempre había querido.
Y entonces tú estás a su lado, mientras a él le hacen daño. Y tú no te das cuenta. Hasta que él corta con ella.
Y entonces todo empieza con un beso a escondidas en un portal, más de un polvo a escondidas en cualquier sitio. Luego deja de ser a escondidas. Y después es demasiado tarde.
Y ahora te planteas, si es este el futuro que querías. Y lo cierto es que no sabes contestar. Lo has probado con  todo, todo ha fallado. Y solo deseas, más que nunca, que por una vez las parcas tejan este último hilo con un poco más de amor.

Let my fly, my dear. Fly away.

Y a veces la necesidad de volar es tan apremiante, mientras escuchas grupos olvidados, viendo el humo de tu último cigarro huir por la ventana, mientras deseas fundirte con él y volar hacia la noche sin estrellas.
Puede que necesite escapar, de mis preguntas sin respuesta, de tus nuncas, y de la sensación agobiante de necesitar a alguien tanto. Odio depender de alguien, y sobre todo de ti. Eres mi única perdición. Puede que quiera escapar, pero eres tan necesario como el humo que escapa de mis pulmones de ese cigarro de después. Una vez me dijiste que te gustaba mi silueta, fumando,  recortada contra las luces anaranjadas de las farolas de la calle. Puede que mi destino sea fumar a solas, amar al rock n' roll y huir antes de que amanezca de unas sábanas ajenas.